Fórmulas con pescado

Como garantía de salud, el pescado cuenta con yodo, fósforo y vitamina B y un bajo contenido graso que favorece cualquier dieta de adelgazamiento. Por otra parte el pescado exige menor cocción que la carne, lo que conlleva un uso mínimo de combustible y una economía tácita.

Un plato rápido con pescado puede ser simplemente el hacerlos poché en un courtbouillon: hervido suavemente en un caldo de aromas o relleno y bañado con alguna salsa. Un relleno accesible pueden ser puerros salteados y sancochados con vino blanco que se lleva de maravilla con, por ejemplo, una merluza.

Siempre es positiva la alianza entre verduras y pescados y, generalmente de bajo precio. Un buen ejemplo son las papas que, ya sea simplemente hervidas o de tantas otras formas, suavizan el sabor del pescado conformando un dúo realmente delicioso.

Desaprovechar el pescado es también desaprovechar el ahorro. Para que esto no ocurra es necesario saber cocinarlo perfectamente. A calor suave si se trata de cocción en un medio húmedo (vino. caldo. etcétera). Durante poco tiempo, a calor normal, en un medio seco (horno).

Un método muy de moda y práctico para cocinar el pescado es hacerlo al vapor. Se coloca en filetes en un recipiente de fondo agujereado o simplemente, en un colador sobre vapor de agua con aromas bien tapado. El líquido no debe tocar el pescado y puede servir para preparar luego una salsa.

Otra fórmula rápida consiste en colocar los filetes entre dos platos untados con aceite o mantequilla (ya salpimentados o rociados con limón) que deben tapar completamente una cacerola que contenga poca agua. El vapor cocina el pescado, que resulta muy sabroso y no pierde nada de su jugo.

Otra receta útil es la de envolver el pescado en papillotes. En rodajas o trozos, aderezados y puestos sobre aromas y verduras en juliana, el pescado se cubre con trocitos de mantequilla y se envuelve en papel de aluminio. Estos papillotes se colocan sobre la parrilla de carbón o del horno y se cocinan, según el grosor de la pieza, durante quince minutos. Se sirven con el papel abierto en forma de flor con todo su jugo.

Otra propuesta rápida y relativamente económica puede ser la del pescado frito que puede resultar delicioso si se lo pasa, antes de su cocción, por polenta y copos de cereal molido en lugar de la clásica harina o pan rallado.

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