Las variedades y cualidades del Té

El té es una bebida milenaria que se toma en todos los países del mundo. Existen muchas clases de té y cada tipo va a depender del proceso de oxidación o añejamiento que siguió la hoja luego de cosecharse.

Cuando la hoja de té no se oxida tenemos el té verde o el blanco, mientras que el té negro es el resultado de todo el proceso antes mencionado.

También encontramos el té oolong o semioxidado muy similar a los que no se oxidan como el blanco o el verde.

Ahora dentro de estas cuatro clases se encuentra una variedad de gamas que van desde el amarillo, dentro del té verde hasta el puerh, dentro del té negro.

Los tés con aromas son otra de las variedades que resultan del agregado de un sabor adicional al propio de la infusión, destacando los florales como el té de jazmín.

Pero cada tipo de té tiene propiedades que van a beneficiar la salud evitando la aparición de ciertas enfermedades.

Por ejemplo el té blanco posee un suave sabor y el color que queda en la tasa es medio transparente. Se ha comprobado que resulta beneficioso para la piel y previene las enfermedades cardiacas.

Por su parte el té verde es diurético y tiene un alto contenido de flúor, se han realizado varias investigaciones llegándose a concluir que ayuda a prevenir el cáncer.

Como se mencionó el llamado té oolong es un intermedio entre el té verde y el té negro pero su sabor es similar al té del color de la esperanza a pesar de tener un color oscuro.

El té negro es maltoso, posee un elevado contenido de teína y su sabor es más intenso. Su consumo es recomendado por las mañanas para cargarse de energías  sentirse muy activo.

También se ha comprobado que el té es capaz de eliminar esa sensación que se queda en el paladar cuando se ha comido un alimento con mucha grasa. La revista Current Biology publicó el estudio efectuado donde se afirma que si se toma por sorbos, elimina la huella gustativa que deja la grasa en el paladar.

Esta investigación tenía como principal objetivo determinar porque algunos alimentos y bebidas que son astringentes pueden reducir el malestar que provoca el ingerir algo muy grasoso.

Dentro de los resultados que arrojó la investigación destaca el que asegura que el té es mucho más eficaz que el agua cuando se trata de reducir y desaparecer la estela de grasa que permanece en la boca.

Finalmente se comprobó también que el té desvanece la sensación de gordura que se siente luego de comer y que resulta mejor tomar esta infusión que varios vasos con agua.