Glutamato monosódico
También conocido como Ajinomoto, es esa substancia blanca y absolutamente química que usan mucho los japoneses, los chinos y los peruanos para realzar los sabores. También la usan los fabricantes de alimentos para dar sabor extra a muchos alimentos desecados, tipo sopa en cubitos o para hacer algo atractiva la nada. No actúa sobre los alimentos sino sobre las papilas gustativas ampliando su capacidad para detectar matices de sabor: si uno se pone Ajinomoto en la lengua, obtendrá gusto a la propia lengua. Dosis excesivas de glutamato monosódico pueden provocar indeseables dolores de cabeza, sofocones y problemas arteriales.
Sin plomo en el vino
Si altas dosis de plomo han demostrado ser fatales, dosis mínimas también son malas. Provocan depresión y dolores musculares. Este metal perverso aparece donde uno menos lo espera. En el vino por ejemplo. El último berrido ecológico francés: desaconsejar el uso de cápsulas de plomo en las botellas. Los expertos recomiendan extraer completamente la cápsula antes del descorche, para que ni la más leve viruta de plomo llegue a contaminar a esta bebida sanísima. Gente mal intencionada acusa a los franceses de exagerar los riesgos del plomo para no usarlo mas en sus cápsulas y ahorrar así un costo importante.
Calditos siempre listos
Anímese y prepare una gran cantidad de caldo, ya sea de pollo, de carne, de verduras o de pescado, y congélelo para usarlo mas adelante.
Para esto, deje enfriar el caldo a temperatura ambiente, retire toda la grasa solidificada, vuelva a hervir y reduzca bien para que quede concentrado. Deje enfriar y pase a cubiteras. Lleve al freezer hasta el momento de agregarlo en guisos, salsas o lo que este cocinando. ¡Notará una gran diferencia!
La sopa está muy salada
Si siguió nuestro consejo anterior, puede ser que por acción del frío y la concentración del caldo, al utilizar los cubitos en sopas o salsas, están queden muy saladas. O tal vez preparó sopa o salsa desde cero y se descuidó con la sal. Primera medida posible: agregarle agua, pero no siempre se puede. Pruebe añadiendo una lata de tomate (si combina con la salsa), o un poco de azúcar negra que no desalará pero disimulará. Hay otro recurso, rodajas finas de papa cruda sumergidas en la sopa hasta que se vean traslúcidas, lo cual indicará que algo de sal absorbieron. Con esta técnica puede desalar el océano, sólo necesitará 500 millones de toneladas de rodajas de papas crudas.
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