Consejos y trucos para el menú de Navidad


El menú de Navidad

La elección del menú ya sea para la cena de Nochebuena o el almuerzo de Navidad, es mejor hacerla con antelación y evaluando bien todas las posibles opciones. Primero hay que decidir si se elegirán platos tradicionales o innovadores. La simplicidad es siempre la mejor estrategia para acontentar los diferentes gustos de los invitados, y evitar sorpresas desagradables. Y seguramente será mejor privilegiar recetas ya probadas y de las que se conoce su resultado.

Aperitivos

Hay que tener cuidado con la cantidad y variedad de entrantes, para evitar que los invitados lleguen demasiado saciados a la comida principal. Elegir bocados ligeros acompañados con una bebida suave, tal vez a base de piña o fresas y poco alcohólica.

Primer plato

Una pasta al huevo hecho a mano les gusta a todos y es de cocción rápida. Pero es mejor no arriesgarse, si no se tiene suficiente experiencia o los invitados son numerosos. El risotto requiere un poco de experiencia. Sin duda, una buena pasta al horno nunca traiciona y permite preparar la salsa de antemano, tal vez 1 o 2 días antes. Si se opta por un primer plato frío, una ensalada con langostinos, siempre será bienvenida.

Plato principal

Si el plato principal es a base de carne, comprarla siempre en un negocio de confianza. Esto permite comprar con anticipación y congelarla; si la carne es buena, incluso descongelada resultará excelente. Si se prefiere pescado, a diferencia de la carne es mejor comprarlo fresco, el día que se cocinará.

Por supuesto, estas y otras opciones similares son las indicadas para los climas fríos; en caso de que su sea en climas cálidos, como por ejemplo en Sudamérica, lo ideal es preparar una cena estilo buffet, con distintas preparaciones de carnes y verduras frías o, por qué no, una excelente "parrillada"

Postres y mesa dulce

Aquí no hay consejos, sólo vale el gusto personal y las tradiciones familiares. Deje volar la fantasía. Dependiendo del clima, el postre pude ser caliente o frío, . Lo que no debe faltar, luego de la cena, es la mesa dulce con sus infaltables turrones, frutos secos, panettones, roscones y todos los dulces preferidos de la familia.

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