Sidra

La sidra es una bebida alcohólica producida por la fermentación de manzanas. Conocida desde la antigüedad, (600 aC), la sidra tuvo su mayor difusión en las áreas de influencia celta, aquellas que son todavía los mayores productores y consumidores, Irlanda, Inglaterra y el noroeste de Francia, Normandía y Bretaña; también en el Norte de España se produce y consume mucha sidra, especialmente en Asturias y el País Vasco. La sidra se produce también en otros países europeos como Suiza, Alemania, Italia y Bélgica.

Etapas de la fabricación de sidra

La manzana utilizada para producir sidra no es la clásica manzana de mesa, sino la manzana silvestre, menos dulce, rica en taninos y con una acidez equilibrada, cuya variedad se conoce precisamente como "manzana de sidra". Estas manzanas se cosechan desde septiembre hasta finales de octubre en un grado de maduración casi amargo.

Las manzanas se lavan y se trituran en máquinas especiales que dejan caer el jugo en una prensa. El jugo obtenido después del prensado rico en azúcares, ácidos, taninos y pectinas, se somete a la sidrificación, un proceso en que se lo trata con sales de sulfito de potasio para que se mantenga intacto y no de lugar a oxidaciones o fermentaciones no deseadas. A continuación se produce la verdadera fermentación, con la adición de levaduras seleccionadas; más tarde la clarificación y filtración, con lo que la sidra está casi lista, dejándosela reposar en envases herméticamente cerrados en un lugar oscuro y seco durante unos 3 meses. Por lo general, con la primavera, la sidra está lista para ser embotellado.

Características organolépticas de la sidra y maridajes

La sidra es una bebida ligeramente carbonatada, de color más o menos ambarino y ligeramente ácida, dulce y amargo al mismo tiempo. En promedio tiene un contenido alcohólico de entre 4 y 8 grados y es muy refrescante.

La sidra en la cocina es muy versátil y se puede utilizar para cocinar la carne o el pescado; la sidra más seca acompañan muy  bien a los quesos estacionados; mientras que la dulce es ideal para saborear con diversos tipos de postre.

Un uso alternativo  es también mezclada en cócteles como el Spritz o Kyr, en sustitución de los vinos espumantes.

¿Cómo se sirve la sidra?

Quien ha tenido el placer de beber sidra en una sidrería asturiana, normanda o Inglesa, habrá notado la peculiar manera de servir esta bebida: el camarero vierte el líquido con la botella por encima de su cabeza mientras mantean la copa a una distancia de aproximadamente 50 cm. Esto se debe a que la sidra necesita una aireación óptima antes de ser bebida, y verterla a esta distancia favorece el desarrollo completo de sus cualidades organolépticas. Otra regla es que se debe verter de a poco por vez en el vaso y que esta cantidad debe tomarse de una sola vez para no perder el  verdadero gusto de la sidra, que se alteraría si permaneciera inmóvil en la copa.