Coles de Bruselas: ideales para la salud de los huesos

¿Coles de Bruselas? Una verdadera panacea para los huesos. Y no solo. También para los ojos, el corazón, la próstata y el cerebro, estos vegetales representan una preciosa mina de salud. Los huesos, sin embargo, son los que más pueden beneficiarse del consumo de coles de Bruselas. Y aquí está la razón.

Mina de vitaminas y minerales

El secreto de la relación privilegiada de las coles de Bruselas con la salud ósea radica en la abundante presencia en estos pequeños vegetales de vitamina K, que garantiza la correcta funcionalidad de algunas proteínas que forman y mantienen nuestros huesos más fuertes. Pero no solo eso: las coles de Bruselas también contienen excelentes cantidades de sales minerales (hierro, calcio y fósforo), así como proteínas y fibras. Las otras vitaminas presentes son las del grupo B, vitamina A y vitamina C.

Propiedades infinitas

Estimulantes de la actividad y concentración cerebral, las coles de Bruselas también deben estas propiedades a otros dos elementos en las que son particularmente ricas: tiamina y ácido fólico. Además, es un alimento con una importante acción beneficiosa sobre el metabolismo hormonal femenino y con reconocidas propiedades antianémicas y desintoxicantes. Por si fuera poco, las coles de Bruselas son también una auténtica mina de antioxidantes, entre los que destaca la zeaxantina, conocida por su acción protectora de la retina de los ojos.

Una receta para la salud ósea

Ahora, sabiendo lo bien que hacen las coles de Bruselas, es el momento de una receta para la salud ósea: coles de Bruselas y salmón, pescado rico en vitamina D, que es otro aliado importante en este sentido. Comenzar lavando e hirviendo 150 gramos de coles en agua con sal durante diez minutos; Mientras tanto, en una sartén con un poco de aceite, cocinar dos filetes de salmón. Después de escurrir las coles, se saltean en otra sartén con un poco de mantequilla; el toque final: con perejil y un poco de pimienta.