Guacamole sin aguacate ... con vegetales verdes
Chacho, una cadena Tex-Mex, tuvo que advertir a sus clientes en julio: "Los aguacates no están disponibles temporalmente. Como resultado, no podemos producir ni vender guacamole". "En su lugar, ofrecemos un "mockamole" hecho de diferentes vegetales verdes que consideramos deliciosos. Podríamos haber comprado pulpa de aguacate congelada, pero tiene un sabor tan artificial que nos negamos a usarla". El mockamole de chacho se prepara con brócoli, guisantes y otras verduras verdes, así como con diferentes especias.
Con calabacitas
Según Insider, otros restaurantes han encontrado una alternativa muy válida: han reemplazado los aguacates con calabacitas (calabazas mexicanas). "Actualmente no solo son más baratas que los aguacates, sino que cuando se transforman en una crema combinadas con tomate mexicano, cilantro, ajo y jalapeño, adquieren un tono verde brillante que se asemeja al guacamole real". La cadena de restaurantes L.A. Taco también realizó una prueba comparativa e informó que entre la salsa preparada con calabaza mexicana, cilantro, ajo, chile jalapeño y tomatillos (con la adición del aceite utilizado para freír los pimientos) y el guacamole real sería difícil ver la diferencia.
La primera receta, con guisantes
Pero una de las primeras recetas de mockamole fue la propuesta por el sitio web Creative Loafing y tomada del libro de cocina Meatless Monday, hace ya varios años: el ingrediente principal son los guisantes congelados (esta solución, entre otras cosas, reduce las calorías en casi tres cuartos y la grasa en 34 gramos). Para un tazón de mockamole, se necesitan una taza de guisantes descongelados, una cucharadita de comino molido, tres cucharadas de cebolla picada, un diente de ajo grande picado, una cucharada de jugo de limón o lima, una cucharada de aceite de oliva virgen extra, media cucharadita de ají molido (o un jalapeño fresco picado), sal y pimienta negra molida y, si se desea, también cilantro fresco picado.
Se deben mixear los guisantes, el comino, la cebolla y el ajo en un procesador de alimentos, hasta obtener una crema suave, luego agregar el jugo de limón y el aceite de oliva y continuar mezclando. Probar y agregar el chile, la sal y la pimienta, luego mezclar durante unos minutos antes de servir... por supuesto con chips de tortilla.
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