¿Qué alimentos son malos para el estado de ánimo?

Cuando se habla del binomio dieta alimentaria y bienestar, la atención generalmente recae en alimentos que contienen sustancias que pueden aliviar el estrés, la fatiga y el insomnio y, por tanto, son capaces de estimular el buen humor. En particular, se trata de alimentos caracterizados por un alto contenido en triptófano, un aminoácido esencial que regula el estado de ánimo del cerebro. Si bien es bueno que estos "alimentos del buen humor" estén presentes o se introduzcan en una dieta equilibrada, por otro también es importante conocer y limitar la ingesta de aquellos que, por el contrario, pueden aumentar las sensaciones y sentimientos negativos .

¿Cuáles son los "alimentos de la infelicidad"?

Cabe señalar, en primer lugar, que la ciencia es la que decide qué alimentos tienen efectos secundarios desagradables en nuestra felicidad . Esta categoría de alimentos y productos alimenticios, de hecho, se caracteriza sobre todo por una gran cantidad de azúcar refinada y carbohidratos refinados y almidonados, pero también de ácidos grasos hidrogenados y sodio. Todas estas sustancias, aunque inicialmente dan una agradable sensación de plenitud, luego terminan siendo dañinas tanto para nuestro organismo como para nuestro estado de ánimo. En particular, el aumento de azúcar en sangre puede provocar síntomas como ansiedad, fatiga, irritabilidad y dificultad para concentrarse; el consumo de grasas hidrogenadas (o ácidos grasos trans), por otro lado, puede ponernos más nerviosos y agresivos ya que, además de disminuir el nivel de colesterol bueno y tener efectos sobre el metabolismo, dificultan la ingesta de grasas Omega 3, capaces de regular estado de ánimo y comportamiento.

Atención al "comfort junk food"

La mala noticia es que, como hemos visto, los alimentos que pueden empeorar el estado de ánimo a menudo se esconden detrás de la etiqueta engañosa de “comfort food”, es decir, alimentos a menudo asociados con tradiciones, hábitos y recuerdos personales felices, por los cuales nos sentimos atraídos más fácilmente. Si bien algunos alimentos reconfortantes son saludables, bajos en calorías y nutritivos, la mayoría de ellos contienen las sustancias nocivas que hemos analizado anteriormente y que, de hecho, nos brindan una felicidad pasajera para luego dejarnos una sensación de irritabilidad, tristeza, apatía y grandes sentimientos de culpa. Lo que complica todo es que esa sensación temporal de bienestar es un efecto químico de los azúcares y grasas contenidos, que inicialmente aumentan la liberación de dopamina, el famoso neurotransmisor que estimula el placer y la motivación personal.

La búsqueda de la felicidad puede comenzar en la mesa: qué alimentos limitar

En definitiva, estos alimentos ricos en calorías que pueden empeorar el estado de ánimo son una auténtica trampa en la que es fácil caer. Entre los muchos alimentos de los que se recomienda un consumo moderado se encuentran, en primer lugar, los alimentos envasados, congelados o liofilizados y los productos horneados ricos en grasas hidrogenadas, azúcar refinada y sal; van desde papas fritas en bolsas hasta bocadillos dulces y salados y productos alimenticios menos sospechosos, como alimentos enlatados, cereales, yogur, jugos de frutas o barras energéticas. Saber leer y comprender las etiquetas de los productos alimenticios es esencial, también porque el peligro a menudo se esconde detrás de etiquetas y términos tranquilizadores como "ligero", "vegano" o "sin aceite de palma".
Es bueno también, prestar mucha atención al alcohol y las bebidas carbonatadas, a menudo ricas en azúcar, y por último, pero no menos importante, bebidas y alimentos que contienen cafeína . Esta sustancia, de hecho, puede tener efectos positivos sobre el estado de ánimo si se consume con moderación, de lo contrario puede provocar agitación y ansiedad.

En definitiva, una dieta variada y equilibrada no es suficiente para ser feliz, por lo que es importante pensar en los efectos de lo que comemos sobre nuestros sentimientos eligiendo alimentos que nos hagan sonreír y sentirnos bien.