En casa, en la oficina, por la mañana, tarde o noche... siempre tiene ganas de comer, incluso después de una buena comida? La respuesta: usted consume muchos alimentos ricos en grasa y/o azúcar (chocolate, patatas fritas, galletas, dulces ...), a expensas de la línea y la salud.
Tener continuamente necesidad de comer puede depender de varios factores:
- Comidas demasiado ligeras: no siendo suficientemente abundantes y no conteniendo suficienteshidratos (pan, pasta, arroz, patatas ...), el desayuno, el almuerzo y la cena no sacian y determinan, además de la fatiga, una sensación de hambre constante.
- No prestar atención a las propias sensaciones. El cerebro tarda unos 20 minutos en recibir las señales de saciedad del estómago. Al comer muy rápido, o en lugares con mucho ruido, o sin un mínimo de calma, no se sienten estas señales.
- Desequilibrio del organismo. Si no puede dejar de picotear, el cerebro y el sistema digestivo se acostumbran a recibir alimentos en todo momento, y los demandan sin preocuparse por las necesidades y horarios.
- Aburrimiento. También se picotea constantemente para llenar una falta afectiva o por aburrimiento. Comer es una ocupación tranquilizante y permite no pensar en el vacío o rutina de la vida cotidiana.
Como regularizar la alimentación
Para evitar esta costumbre de comer entre horas, preste atención a las comidas. La composición de las principales comidas del día tiene un papel fundamental. De hecho, para resistir hasta la próxima comida, se necesita energía duradera. Por lo que, cada comida debería contener alimentos con almidón (pan, pasta, arroz, granos, frijoles, patatas) que liberan su energía gradualmente; frutas y veduras, ricas en fibras saciadoras.
Es mejor disfrutar de uno o dos refrigerios adicionales que consumir anárquica y constantemente. Elegir para estos refrigerios alimentos saludables y ricos desde el punto de vista nutricional: una fruta, un yogur, una rebanada de pan con una cucharadita de miel, etc.
Beber puede ser suficiente para contener un ataque de hambre. En caso de un deseo incontrolable de comer, recurrir en primer lugar a un buen vaso de agua o una bebida baja en calorías como una taza de leche o té ligeramente dulce.
Mantenerse ocupado. No permitir que el impulso de picar algo se apodere de nosotros, tratar de salir, moverse, hacer deporte, reunirse con amigos ... Si el cuerpo y la mente están ocupadas, no estarán pensando en comer!
5
5
1
1
Comentarios sobre este artículo (0)