5 alimentos que nunca se deben poner en la nevera

Este artículo está dedicado a los maníacos de la refrigeración, a los que apenas llegan del supermercado colocan hasta el suavizante en la heladera, que organizan meticulosamente cada estante. A tener en cuenta esta regla básica: no todos los alimentos van en la heladera


Alimentos que no se deben poner en la heladera

Salsa de soja: En este caso, debería inspirarnos la costumbre de los restaurantes chinos y japoneses: la salsa de soja siempre está presente en las mesas. Su esencia está ya fermentada por lo que es inútil su conservación a baja temperatura.

Salsa picante: La base de vinagre de la salsa picante hace que esta mezcla sea adecuada para mantenerla fuera del refrigerador hasta durante 3 años.

Miel: Poner un frasco de miel en la nevera podría producir su cristalización, haciendo que sea imposible de usar. Guardar el frasco en la despensa, al igual que el aceite, es esencial que la miel no entre en contacto con la luz.

Tomates: Es mejor mantener este vegetal fuera de la nevera porque, en contacto con las bajas temperaturas, pueden volverse harinosos. Lo ideal es guardarlos en una bolsa de papel, a temperatura ambiente, pero lejos de la luz.

Cebollas: Se encuentran entre los productos de cocina más difíciles de conservar: el secreto es mantenerlos en una bolsa de papel, fuera del refrigerador y lejos de la humedad.


Los productos que sí deben almacenarse en el refrigerador

Jarabe de arce: Por ejemplo, ¿sabías que el jarabe de arce debe guardarse en la nevera? De hecho, si se coloca en el armario, la botella podría enmohecerse, acortando la vida útil del producto. Conservado en un recipiente de vidrio, puede durar hasta un año desde su apertura. Para devolverlo a su estado líquido, pasarlo por unos segundos por el horno de microondas antes de usarlo.

Mayonesa: Una vez abierta, la mayonesa debe conservarse en el refrigerador, donde puede almacenarse durante dos meses. Basta mantenerla en el sector más frío.

Salsa ketchup: También el ketchup va en el mismo lugar. La sal, el vinagre y el azúcar pueden ser engañosos y hacer pensar que, al ser conservantes naturales, protegerán la salsa del deterioro. Pero, como con cualquier alimento refinado, debe conservarse en la nevera después de abrirse para mantener inalteradas las características orgánicas de la salsa. Así que poner este aderezo inmediatamente en la nevera, luego de haberlo abierto.

Aceite de semilla: Se sabe bien que el aceite de oliva debe mantenerse en un lugar fresco, en una botella de vidrio muy oscuro o en una lata, evitando la exposición al aire. Pero otra historia es la de los aceites de semillas. De hecho, el aceite de girasol, rico en vitamina E, que es probable que se altere por el calor, debe mantenerse en el refrigerador. Lo mismo se aplica al aceite de semilla de lino y al aceite de cáñamo: rico en omega 3, omega 6 y vitamina F, es mejor enfriarlos para evitar que el ambiente los desnaturalice.

Mostaza: Las mostazas deben mantenerse en el refrigerador una vez abiertas. Las mostazas italianas se conservan solo unas pocas semanas, las francesas y las inglesas se conservan durante unos meses, ya que no contienen muchos azúcares. Sin embargo, incluso si se conserva correctamente, con el paso del tiempo, la mostaza pierde su característico sabor picante y sabroso.

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