Cinco formas creativas de usar el queso azul en la cocina

El queso azul es un queso de elaboración muy antigua,
de color blanco a paja con rayas internas de color entre el azul y el gris-verdoso debido a la presencia de moho.

Se utiliza en muchas preparaciones refinadas por chefs internacionales, ya que da un resultado sorprendente a las recetas, gracias a su sabor particular.


Combinaciones

El queso azul es un excelente producto para consumir solo, tal vez acompañado de un buen vino, tinto o blanco, dependiendo de la variedad picante o dulce.

Se presta a numerosas e imaginativas combinaciones, desde vegetales crudos hasta mermeladas, frutas y miel. La combinación más típica es con cremas dulces, y frutos secos especialmente nueces.


Creatividad y gusto

Se puede usar el queso azul para infinidad de creativas tapas, como por ejemplo, triángulos de polenta con champiñones salteados y calamares.

También se lo puede usar para preparar maravillosas salsas o, como primer plato, para una pasta al huevo con pesto de apio y copos de queso azul crudos. El resultado será sorprendente.

Pasando a los segundos platos, una de las combinaciones más particulares es seguramente con atún.

Se obtiene un plato muy interesante preparando el filete de atún empanizado en sésamo, salteado durante unos minutos, colocado sobre una fondue de queso azul, leche y alcaparras. Decorando todo con cebollas caramelizadas con azúcar de caña, el éxito está asegurado.

Al llegar al postre, los más exigentes podrían dudar un poco, pero seguramente un helado de crema americana y queso azul, con hojaldres y una pizca de pistacho picado, será una experiencia de sabor única.

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