La extraordinaria versatilidad del yogur griego

Uno de los alimentos más simples y ricos en proteínas es el yogur griego. Un poco queso, un poco yogur, esta consistencia lo hace versátil e increíblemente adecuado y adecuado para muchos usos, tanto dulce como salado.

Durante una de las 3 operaciones de filtrado a las que se somete, el yogur griego pierde su sodio y la lactosa que las bacterias no han fermentado y, por lo tanto, es un alimento perfecto para aquellos que deben seguir una dieta baja en sodio y sin lactosa. Además, con tan solo 52 kcal por 100 g de producto, es ideal para cualquier tipo de topping que se desee asociar con él.

Estas son algunas ideas para combinarlo.

Miel y nueces

Esta es una combinación muy simple pero absolutamente ganadora! Se puede elegir el tipo de miel preferido: flores silvestres o acacias para un sabor dulce y delicado, o miel de castaña más intensa y aromática. También la miel de azafrán más aromática. Agregar un puñado de nueces desmenuzadas para darle una nota crujiente y sabrosa.

Almendras, puré de manzana y bayas de Goji

Para variar con las consistencias y llenarse de antioxidantes, la combinación de almendras (incluso mejor tostadas) y bayas de Goji, hará del yogur un alimento saludable y un suplemento perfecto para después del entrenamiento.

Mermelada de ciruela y cubitos de pera

La nota agria del yogur griego se puede suavizar con la mermelada favorita. Queda muy bien con mermelada de ciruela y combinarla con la crocantez de la pera, una fruta simple y jugosa pero crujiente!

Finalmente una nota salada ... ¡el tzatziki!

Finalmente, para aquellos a quienes no les gusta lo dulce pero desean disfrutar de la sabrosa nota del yogur griego, simplemente agregar un diente de ajo rallado, un pepino, también rallado y escurrido de su agua, jugo de limón y algunas hojas de menta fresca, para tener una deliciosa crema para acompañar con pan de pita, o algún bizcocho salado.