Matrimonios culinarios

Calamares y limón

Estos dos ingredientes arman una excelente pareja porque el sabor suave del primero no cubre la sutileza y la acidez del segundo. Por el contrario, el calamar puede transmitir su sabor y textura y junto con el limón se dejan expresar mutuamente. Además, cuando se dora este marisco, el sabor ácido del cítrico potencia aun más la textura dorada, caramelizada del calamar.

Chile ajo y jengibre

Esta combinación evoca la cocina asiática, donde se utiliza como base de muchas preparaciones, y también esta presente en varias regiones de Centroamérica. Se trata de tres productos fuertes: está el sabor picantito del chile, el jengibre, que también es picante y ácido, y el ajo, que es uno de los reyes de la gastronomía. Si sabemos usarlos bien, logramos que los tres se potencies y generen una base para preparar salteados u otros platos.

Pan y mantequilla

Es la combinación de toda la vida, que disfrutamos desde chicos. La mantequilla es sabrosísima porque tiene grasa y algo muy importante en la gastronomía, con lo que hay que saber jugar, es que en la grasa esta el sabor. Por su parte, el pan aporta el contexto y también la textura. Si tenemos estas cualidades de sabor, esponjosidad y crocantez, estamos ante un ensamble perfecto.

Vainilla y leche

La vainilla es uno de los productos más mágicos que tiene la gastronomía, porque es algo exótico y tiene un perfume único. Por supuesto, hablamos de la vaina, no de la esencia. Por su parte, la leche es un medio líquido, por lo que la vainilla puede fusionar muy bien, y además tiene grasa, que capta el sabor. Entonces se produce una complementación muy buena.

Salmón y eneldo

El salmón tiene un sabor sutil, pero con una suficiente cantidad de grasa que lo realza. El eneldo es una hierba perfumada e intensa sin ser agresiva. Es una combinación de dos sutiles que se potencian a través del aroma y el sabor. Hay un plato típico de Europa del Este -todos los cocineros del mundo lo emplean- que quizás sea una de las combinaciones más antiguas de esta pareja gourmet: gravlax, una preparación de salmón macerado y marinado con eneldo.

Mozzarella, pimienta y aceite de oliva

A la textura suave de la mozzarella se suma el perfume intenso del oliva y el toque de la pimienta negra que lleva la combinación hacia arriba. Esto nos remite a Italia, al Mediterráneo, a Grecia, al norte de África y a la cocina armenia. Para este queso sutil, preferir el aceite virgen suave porque el oliva extra virgen auténtico es un poco fuerte y espeso.