Azafrán en la cocina: 3 ideas para disfrutar de esta especia

Con su precioso color y su aroma único, el azafrán es la especia más fascinante (y también la más cara). Se obtiene de la parte superior de los pistilos (estigmas) rojo anaranjado del crocus sativus, una pequeña flor de pétalos violeta que se recolecta entre octubre y noviembre, a mano, y con extrema delicadeza: para un kilo de azafrán se necesita ¡unas 150.000 flores!

Se vende en hebras, muy caro y muy aromático y en polvo, más común y más aconómico. Aquí tienes 3 ideas originales y rápidas para disfrutar de esta preciada especia

Idea 1: Rebozado con cerveza

Mezclar 150 g de harina de arroz, 30 g de fécula de maíz, 2 sobres de azafrán y 180 g de cerveza, obteniendo un rebozado.
Agregar trozos de verduras al gusto (pueden ser 1 cebolla y 2 zanahorias), luego sofreír en abundante aceite caliente por un par de minutos; escurrir sobre papel de cocina, añadir sal y servir inmediatamente, acompañado de una salsa elaborada mezclando 20 g de salsa de soja, 10 g de vinagre de manzana y 10 g de miel de acacia.

Idea 2: Queso con especias

Reducir en una cacerola 40 g de nata fresca con 2 sobres de azafrán durante un par de minutos, hasta que el volumen se haya reducido a la mitad; sazonar con sal, dejar enfriar, luego mezclar 200 g de queso de cabra o ricotta. Untar la crema obtenida sobre 4 rebanadas de pan caliente, completadas con un molido de pimienta y decoradas con brotes o flores comestibles.

Idea 3: Detox digestivo

Para 4 tazas, hervir 800 g de agua con 20 g de jengibre fresco picado, 2-3 rodajas de limón y 1/2 cucharadita de pistilos de azafrán. Apagar, dejar enfriar y servir endulzando al gusto con 1 cucharadita de miel.