Cabello perfecto con productos muy naturales

Un cabello radiante y lleno de vida es el sueño de muchas mujeres, es el marco del rostro y tenerlo lindo se convierte en una gran preocupación. Es cierto que se pueden encontrar miles de productos en el mercado que prometen muchos beneficios para el , pero no hay que olvidar que lo natural siempre es lo mejor.

Sabemos de los beneficios que trae consigo el aloe vera, dueño de un pH balanceado, un ingrediente clave para tener un cabello saludable, además ayuda en su crecimiento, a combatir la caspa y a tenerlo siempre humectado.

Mezclado con agua se convierte en un desenredante ideal y sirve para definir y moldear los rizos.

Si se quieren acondicionadores naturales, la manteca de karité es otra alternativa. Con ella se han elaborado champús y cremas para rizos. La manteca de karité ayuda a reparar el cabello dañado, sella la humectación y lo mantiene mucho más saludable.

La miel ha sido desde siempre parte de la medicina natural y también es muy utilizado en el cabello y en la piel. Actúa como humectante y acondicionador para el cabello. Usada después del champú y el acondicionador, resalta mucho más el brillo y hace que se tenga un pelo sedoso y muy suave.

Los aceites también son perfectos para de la hebra capilar, y podemos encontrar muchos según el tipo de pelo o los problemas que se tengan.

Uno muy popular es el aceite de coco, ideal para el cabello reseco que penetrar en el tallo del pelo funcionando de dentro para fuera, fortaleciendo el cabello contra el quiebre. Si se desea, se puede usar el aceite de coco antes del champú.

Para tener un cabello suave, brillante, esponjoso y añadirle volumen sin que se sienta graso, puede usarse el aceite de jojoba. Este aceite es muy parecido al sebo natural que tiene el cuero cabelludo, y alivia el cuero cabelludo seco.

Y un aceite que para muchos solo podía ser efectivo en la cocina, el aceite de oliva, pues no está de más decir que este aceite nutre el cuero cabelludo y mejora la elasticidad del cabello.

Además, desde hace mucho, se ha convertido en el ingrediente estrella de muchos tratamientos profundos como geles, serums y otros más.

Pueden comprarse productos que contengan cualquiera de estos compuestos, o de lo contrario, pueden usarse al natural e ir probando con todos para saber cuál es el que mejor nos sienta.

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