Es tan fundamental como potencialmente peligroso. Las frutas y verduras, especialmente cuando provienen de distribuidores medianos y grandes, necesitan mucho cuidado en la selección y limpieza. Un tema que ha de ser válido tanto para los productos de temporada como para los "siempre verdes" Tanto para los productos empaquetados como para los individuales.
El objetivo debe ser reducir al mínimo la presencia de pesticidas y bacterias, debido a que ambos, por desgracia, están siempre presentes en frutas y verduras. Si bien los primeros son escenciales para garantizar la duración de lo que comemos, las otras anidan cuando nostros equivocadamente, tocamos el producto antes de comprarlo para ver si está bueno
Una campana de alarma especial cuando las verduras y frutas vienen del exterior: algunos "venenos" que están prohibidas en algunos lugares son regulares en otros. Las consecuencias pueden ser diferentes y no inmediatamente perceptibles: desde dolor de estómago a fiebre, desde intoxicación alimentaria hasta asma y diabetes. Una precaución que debe estar siempre presente, especialmente durante el periodo de gestación, y en niños en edad preescolar
Estos alimentos deben ser lavados antes de ser consumidos. Todo va enjuagado con agua, potable y corriente. Incluso cuando se consumen pelados.
También hay que prestar una mayor atención a los productos con una superficie áspera, como zanahorias y patatas. Se cepilla todo con cuidado, incluso con un cepillo de dientes. También deben ser eliminadas, con una incisión más profunda, las partes dañadas del vegetal o fruto Y una vez retirada la cáscara, reponer los alimentos en el refrigerador.Remedios naturales
Existen algunos remedios naturales, como aquellos que combinan agua con ingredientes como el bicarbonato de sodio, gotas de vinagre de manzana o sal. Para limpiar más a fondo un producto se sumerge en agua con alguno de estos ingredientes unos 15 minutos. Luego se enjuagua. Entre los tres, el más recomendado es el bicarbonato de sodio. Y lo más importante, se sugiere siempre para eliminar las cáscaras.
"Las comidas más involucradas en la transmisión de la salmonela - comenta Massimo Andreoni, infectólogo - son los huevos crudos y derivados, y la leche cruda y la carne, preparaciones para postres tales como cremas, frutas y verduras. También las ensaladas pueden ser un vehículo de transmisión, cuando están contaminados antes de su recolección. Por ello se recomienda siempre lavar las verduras para ensaladas bajo el chorro del agua corriente, para reducir el riesgo de contagio".
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