Rusia a la carta

Un viaje al descubrimiento de la historia y las tradiciones rusas también se puede hacer en la cocina, comenzando con los sabores y aromas que caracterizan la gastronomía.

Antes de comenzar, sin embargo, hay que asegurarse de que la despensa esté abastecida con crema agria, eneldo, rábano picante, pimentón y jengibre, ingredientes esenciales para un verdadero menú ruso..

La cocina tradicional rusa era inicialmente pobre, campesina, cuyos ingredientes principales eran los vegetales típicos del norte europeo (repollo, cebolla y papa), la carne sólo en pequeñas cantidades, principalmente carne de cerdo y pescado de agua dulce.

Con el paso de los siglos y bajo la influencia de la cultura europea, especialmente austriaca y francesa, la cocina rusa se fue enriqueciendo con ingredientes y, sobre todo, ha tenido particularmente éxito con las salsas preparadas para acompañar carnes y pescados.

Algunas preparaciones tradicionales

Sobre la mesa tradicional rusa se enseñorean las sopas, desde las de verduras, tales como el Borsch, una sopa de remolacha considerada uno de los pilares de la cocina nacional a las de pescados, como la "Ukha", en sus muchas variantes: "blanca" con cebollas, "amarilla" con azafrán y "negra" con pimienta y clavo de olor.

Infaltables también los vegetales cocidos, como la col Báltica, las setas con crema agria, o los famosos Blinis, similares a las crepas, pero más pequeños y esponjosos; incluso los Piroshki, paquetitos de masa con un relleno de verduras, carne o setas.

La tradición rusa, sin embargo, ha sido capaz de exportar platos ricos y deliciosos, que se han hecho famosos en todo el mundo, tales como la carne a la Stroganoff, así como otros menos conocidos pero igualmente deliciosos, como el esturión en salsa de rábano picante.

Finalmente, para sumergirse verdaderamente en la tradición, hay que conocer absolutamente el rito del té ruso, un rito que tiene la cordialidad y la compañía como eje central.

El té, introducido en Rusia en el siglo XVII, es un poco una excusa para reunirse, socializar y también para mostrar la propia riqueza, expresada es preciosas y refinadas porcelanas y un rico buffet de platos dulces y salados.