Coco, el rey de los trópicos y la cocina

Envolvente y azucarado, un verdadero "rey de los trópicos". La pulpa, la leche, el jugo y el aceite de coco han nutrido a los humanos durante miles de años. No es casualidad que a la palma de coco se le llame "el árbol de la vida". El coco es muy rico en nutrientes, grasas saturadas, carbohidratos, fibras, agua, proteínas, vitaminas y minerales.
El coco maduro se puede rallar o cortar en trozos (es un gran bocadillo para comer tal cual, o para preparar recetas dulces o saladas). Las palmas de coco crecen en las orillas de las playas tropicales de todo el mundo. La palabra "coco" proviene del español y portugués, donde la palabra "coco" significa cabeza.

Se puede decir que es un árbol generoso: además de las nueces, las fibras de las hojas se utilizan para hacer telas y alfombras, la madera como material de construcción, mientras que las raíces largas y delgadas consolidan los suelos. La esfera leñosa que encierra la pulpa blanca es la nuez del coco verde, de la que se obtiene un agua rica en nutrientes. La pulpa se come fresca o deshidratada, en hojuelas y chips excelente para agregar como guarnición (siempre al final de la cocción) a rosquillas y budines, muesli y ensaladas de frutas. La harina, con un delicado aroma a vainilla, es el ingrediente básico de muchos postres crudos sin gluten.

Una idea para hacer de de inmediato

Licuar 100 g de harina de coco, 2 cucharadas de leche de coco, 2 cucharaditas de aceite de coco y 4-5 dátiles en una licuadora, luego formar pequeñas bolitas, hacerlas rodar en un velo de cacao y guardar en la nevera 3-4 horas antes de servirlas.

Precioso como ingrediente y como condimento

La leche de coco se obtiene de la pulpa fresca de nueces de coco prensadas y se le añade agua; es una mina de proteínas y potasio, una sal antifatiga por excelencia.

Mezclado con jengibre, cúrcuma, pimienta y guindilla, espesa la salsa de curry vegetariano y también se usa en lugar de leche de vaca para preparar yogur. Otro "regalo" del coco es el aceite, que se exprime de la pulpa seca: existe en forma líquida que es una panacea para la piel y el cabello o sólida, similar a una mantequilla en cuya composición destaca el ácido láurico, que protege el cuerpo contra el ataque de virus, hongos y bacterias.

En la cocina, el aceite de coco sustituye a las grasas animales: no contiene colesterol y es apto para freír.

Trufas de yogur y coco

Verter 230 g de harina de coco en un bol, agregar 50 g de pasas remojadas en agua tibia y bien escurridas y 250 g de yogur; mezclar bien. Cuando la mezcla esté homogénea, formar muchas bolitas con las manos, del tamaño de una nuez, rodar las bolitas en 30 g de harina de coco, colocar en pirotines y servir.