Calabaza a la parmesana

Cómo hacer Calabaza a la parmesana

Retirar la piel de la calabaza y cortar la pulpa en rodajas finas con un cuchillo afilado o una mandolina.

Pasar la calabaza por la harina, cortar la mozzarella en rodajas o cubos y prepararla para el armado.

Engrasar con aceite el fondo de una bandeja de horno y comenzar a hacer la parmesana colocando en el fondo una capa de rodajas de calabaza, un chorrito de aceite, una capa de mozzarella, un puñado de parmesano y un puñado de pan rallado, completar con sal y pimienta y cubrir con una segunda capa de rodajas de calabaza. Proceder de esta forma con la formación de las capas hasta terminar los ingredientes.

Cocinar en horno precalentado a 200° C durante unos 30-35 minutos, gratinando. También se puede seguir cocinando durante 5 minutos con la función grill. Servir la calabaza a la parmesana caliente.

Alternativamente, para que quede aún más sabrosa se le puede añadir unos 150 gr. de lonchas de jamón cocido.

Ambas versiones de calabaza a la parmesana al horno se pueden conservar durante unos 2-3 días en el frigorífico, dentro de un recipiente con tapa hermética o bien cerrado en la fuente para horno con film transparente o papel de aluminio.
No se recomienda congelar en el frezzer.