Croquetas de calabaza

Cómo hacer Croquetas de calabaza

Limpiar la calabaza quitándole la piel, las semillas y los filamentos internos.
Cortarla en rodajas y colocarlas en una bandeja de horno forrada con papel de horno, condimenta con aceite de oliva y unas pizcas de sal, añadir también el ajo, el laurel y las hojitas de romero.

Cocinar en horno precalentado a 200° durante unos 20 minutos.

Mientras tanto, pelar las patatas y hervir en abundante agua hasta que estén tiernas.

Retirar la calabaza del horno y pasar las rodajas a un bol (si se prefiere, retirar los dientes de ajo).

Tritura la calabaza cocida con un tenedor hasta crear un puré.

Añadir también las patatas cocidas y, siempre con un tenedor, pisarlas y añadir el queso rallado. Si es necesario, añadir otro chorrito de aceite y un poco de sal.

Agregar poco a poco el pan rallado hasta obtener una masa homogénea, que no se pegue a los dedos, pero que se puede moldear fácilmente.

Deja enfriar la mezcla y luego comenzara a formar las croquetas, tomando pequeñas porciones de masa. Recubrir las croquetas con pan rallado y colocarlas en una bandeja de horno forrada con papel de horno.

Hornear a 180° durante 20-25 minutos o hasta que estén doradas.