Pero desafortunadamente, con el calor (causado por el agua caliente o por el microondas) algunos elementos químicos como el bisfenol A se liberan y luego son absorbidos por los alimentos, causando efectos dañinos en el organismo.
Por lo tanto hay que revisar los recipientes que hay en la cocina y guardar solo los recipientes de plástico que no contienen bisfenol A (BPA). En 2008, esta molécula fue prohibida para la producción de biberones y juguetes, pero es legal para otros productos de plástico.
Algunas marcas han agregado el logotipo BPA free o del horno de microondas en sus productos. En cualquier caso, hay que tener en cuenta que cuando el producto tiene las letras PP o el número 7, el contenedor no es adecuado para el microondas.
Las opiniones son contradictorias en el código PP y el número 5. Este material no contiene policarbonatos que requieren la producción de bisfenol A, pero no se recomienda calentarlos a temperaturas superiores a 100 ° C.
Las alternativas
Antes de calentar un alimento, colocarlo en un recipiente de vidrio o cerámica, o mejor aún, almacenar los alimentos directamente en recipientes de vidrio, ya que el vidrio es un material saludable que no libera sustancias.
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