Se pueden comer tanto frescos como secos, dependiendo de la época del año. Son legumbres de sabor agradable y dulce, gracias a la abundante concentración de azúcares que, después del secado, se pierden en lugar de concentrarse.
Veamos por qué es tan importante incluir los guisantes en la dieta:
Son fácilmente digeribles
En comparación con otras legumbres, los guisantes son más digeribles, gracias a su menor cantidad de almidón. No sólo eso, tienen muy poca grasa y calorías, por lo que pueden adaptarse a cualquier tipo de dieta.
Son tolerados incluso por aquellos a los que les resulta difícil comer frijoles y garbanzos.
Ayudan a combatir el cáncer
Los guisantes contienen un polifenol llamado coumestrol, un fitonutriente que sirve para proteger el organismo de la aparición de cáncer de estómago. Lo demuestra una investigación que puso de manifiesto que, a través de la dieta y la ingesta de determinadas sustancias, incluyendo precisamente el coumestrol, se pueden reducir las tasas de incidencia de cáncer de estómago. El contenido de polifenoles en cuestión, está presente en tres tipos de leguminosas: frijoles, guisantes y frijoles. El consumo diario de los alimentos que contienen coumestrol, (en los guisantes contienen más de 2 miligramos), podría proteger nuestro organismo de la aparición de esta enfermedad.
Contra los procesos inflamatorios y degenerativos
Los guisantes también son ricos en saponinas, ácidos fenólicos y diferentes flavonoides. La mayoría de estos fitonutrientes poseen propiedades antioxidantes y anti-inflamatorias importantes en la prevención de enfermedades degenerativas como la enfermedad de Alzheimer, artritis, y degeneración macular. Los antioxidantes también proporcionan beneficios contra el envejecimiento, ya que eliminan los radicales libres responsables del daño celular.
Contra los problemas de hipertensión y riñones
Según recientes investigaciones, los guisantes serían un alimento esencial para la salud de la presión arterial y el riñón. Los investigadores aislaron, a partir de guisantes amarillos, un tipo de mezcla reductora de la presión, constituida por una proteína hidrolizada. Introducida en la dieta de conejillos de indias afectados por enfermedad poliquística del riñón, parece que esta proteína milagrosa habría reducido la presión sanguínea en un 20%. Un alivio para los riñones, porque comenzaron a funcionar mejor, filtrando las toxinas del plasma de manera más eficiente.
Son ricos en nutrientes
Una taza de guisantes cocidos aporta al organismo el 26% de la ingesta diaria recomendada de vitamina A; 38% de vitamina C y 52% de vitamina K. Estas legumbres también contienen grandes cantidades de fibra, ácidos grasos omega-3 (en su mayoría en forma de ácido alfa-linolénico) y muchos minerales y vitaminas esenciales del grupo B. Por otra parte, los guisantes también tienen el doble de la cantidad de proteínas que la mayoría de otros vegetales.
También son útiles en caso de estreñimiento y contienen fitoestrógenos, sustancias similares a los estrógenos femeninos, que pueden servir como valiosos aliados contra los síntomas de la menopausia.
Para terminar, aquí tienes una colección de recetas con guisantes de la que seguro que sacarás ideas para añadirlos a tu cocina y sacar partido a todas estas propiedades.
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