Así, fácilmente se alcanza la temperatura deseada para una taza de café, un plato de pasta o arroz, o un pastel de carne preparado el día anterior, y todo en muy poco tiempo y sin ensuciar ollas. Sin embargo, algunos alimentos son menos adecuados que otros para este método de cocción. Veamos.
Pizza
La pizza es casi más deliciosa al día siguiente de preparada. Se puede disfrutar de ella a temperatura ambiente, pero si le gusta ese particular contraste entre la masa crujiente y el queso fundido y humeante, no calentarla en el microondas: si se calienta poco, quedará muy blanda; con un tiempo poco más largo inmediatamente se pondrá demasiado dura. Es mucho mejor pasarla un par de minutos por el horno normal a 190 °C.
Patatas fritas
Las patatas fritas recalentadas nunca quedan bien (y no son demasiado saludables), ya que es difícil no cambiar el sabor y la textura. Pero el microondas las vuelve particularmente blandas y fibrosas. También en este caso es mejor el horno tradicional o un pasaje rápido por una sartén caliente.
Tortillas o asados
El microondas tiende a deshidratar los alimentos y cocinarlos de manera desigual, por lo que no es muy eficaz en preparaciones grandes, planas o altas. Una tortilla correrá el riesglo de calentarse en los bordes y quedar fría en el medio; en el caso de un asado, estará caliente por fuera, pero por dentro se mantendrá frío.
Huevos enteros con cáscara
El calor producido por el horno de microondas crea una presión en el interior del huevo que, en consecuencia, hará que explote.
Chille picante
Las sustancias químicas liberadas durante el calentamiento, pueden irritar los ojos y quemar la garganta.
Porciones grandes
El tiempo de cocción y el calentamiento por microondas es proporcional a la masa de comida a calentar. Por este motivo, el uso del microondas es más conveniente para porciones pequeñas.
Cómo utilizar el microondas para descongelar
El microondas es ideal para descongelar alimentos crudos (como carne o pescado): todos los aparatos tiene una función específica, a baja potencia ajustada para evitar que la carne y el pescado se descongelen sin cocinarse.
Si en cambio tiene que descongelar un plato ya listo (quedan perfectas las preparaciones como guisos y sopas) mejor utilizar la potencia máxima (que por supuesto acelera el tiempo), comprobando de vez en cuando. Para hacerlo más rápido, revolver de vez en cuando a fin de romper el bloque de comida congelada en trozos más pequeños.
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