Spatzles de espinaca con panceta crujiente

Cómo hacer Spatzles de espinaca con panceta crujiente

Tradicionalmente, los spatzles, los típicos ñoquis tiroleses, se preparan con la clásica pasta de huevo, pero esta versión también es muy popular.


Hervir las espinacas durante 5-6 minutos en agua hirviendo con sal, luego escurrirlas y dejar enfriar. Transferir la espinaca fría a la procesadora con 100 ml de agua y los huevos. Procesar todo y luego verter la crema en un tazón grande. Agregar la harina tamizada y comenzar a amasar, asegurándose de agregar el resto del agua si es necesario. Amasar para obtener una masa compacta.

Dorar las rebanadas de tocino en una sartén a fuego medio, luego frotarlas con papel de cocina para absorber el exceso de grasa.
Picar la panceta y ponerla en una sartén junto con la nata. Llevar a hervor una olla de agua para cocinar el spatzle. Cuando alcance el punto de ebullición, agregar agua y, si se dispone, formar los spatzle con la herramienta especial, haciendo que caigan al agua. Si no, usar un rallador con agujeros grandes.

Tan pronto como los ñoquis suban a la superficie, levantarlos con una espumadera y volcarlos directamente en la sartén con la nata y la panceta. Servir, sazonando con paprika a gust.

Algunas ideas más: si se prefiere, se puede condimentar los spatzle con mantequilla derretida, salvia y parmesano. Se pueden guardar en el refrigerador hasta 2 días después de la cocción.