Polinesia: la cocina de los mil y un peces

La cocina polinesia es muy fresca, fragante y basada en la alta calidad y variedad de sus materias primas: un verdadero placer para la vista, el olfato y el gusto.

El mercado es el primer paso para aprender acerca de la nutrición de la Polinesia, paseando entre verduras locales y tubérculos como el taro, o frutas muy coloridas, como la panassa, el árbol del pan y otras conocida en todo el mundo como el mango, la papaya y el limón, se llega a los mostradores de pescado, caracterizados por su gran variedad y frescura.

Uno de los platos más representativos es el Ma'A Tahití, una mezcla de pescado, cerdo, pollo, patatas y fruta, todo envuelto en hojas de plátano y cocido durante varias horas sobre las piedras calientes del ahimaa, un horno antiguo, excavado en el suelo.

El pescado es el alimento más apreciado, la estrella del menú de los restaurantes y la población local; se cocina de mil maneras, y con frecuencia acompañado de carne de cerdo y pollo.

Hay alrededor de 300 especies diferentes de pescados, la mayoría desconocidos para nosotros. El más popular es el mahi mahi, un pescado de carne blanca y sabor dulce, a menudo empanado con coco; también el ume está presente en numerosas recetas, mientras que el shabu shabu se suele comer crudo. Incluso el halibut se come crudo, marinado en limón, sal y pimienta, la misma preparación de los atuncitos y los peces loro.

En general, el pescado crudo es muy popular, tanto en forma de sashimi compo de sushi. Un receta representativa es el tartare de atún, llamado poisson cru a la Polynesienne, cuya preparación incluye pepino, jugo de limón, tomate, zanahoria, cebollino, todo bañado en leche de coco. El fafaru, en cambio, se marina entero en agua de coco y se sazona con leche de coco, luego se vacía su interior y se sirve con leche de coco y un poco de limón como aderezo.

La kokoda es una deliciosa ensalada con pescados de diversas especies, cortados en cubos y servidos con rodajas de sandía, zanahorias y cebollas, todo sazonado con leche de coco.

Muy popular, especialmente en el verano, es el tartare de cangrejo rematado con rodajas de piña.

Los camarones generalmente se fríen con coco y vainilla y un chorrito de ron.

Para los más románticos, son muy populares los picnics en las playas, disfrutando del pescado fresco, asado en hoguera, en un ambiente realmente mágico.