Tarta de tomate, calabacín y mozzarella

Cómo hacer Tarta de tomate, calabacín y mozzarella

Estirar con un rodillo (sobre una superficie apenas enharinada) la masa y llevarla a un espesor de 5 mm. Forrar un molde circular de 24 cm de diámetro con fondo removible. Pinchar la masa con un tenedor, cubrir con una hoja de papel para hornear y poner sobre ella bolitas de cerámica (o legumbres secas). Cocinar en el horno ya caliente a 180 ° durante 15 minutos. Retirar el papel y el peso y cocinar de nuevo durante otros 5 minutos. Retirar del horno y enfriar.

Cortar los tomates finamente y secarlos con papel de cocina. Cortar el calabacín en rodajas con una mandolina. De la misma forma obtener rebanadas finas de mozarella.

En un bol mezclar el pan rallado con el queso parmesano rallado, ajo picado y albahaca y una cucharada de aceite de oliva virgen extra. Mezclar y verter el compuesto sobre la masa ya horneada, esto absorberá cualquier líquido de las verduras que se formarán durante la cocción.

Rellenar la base de la tarta alternando con rebanadas de calabacín, tomate y mozzarella comenzando por la circunferencia externa y superponiendo un poco las rebanadas. Continuar de forma concentrica hasta completar toda la superficie. Agegar un hilo de aceite de oliva virgen extra y sazonar con sal y pimienta recién molida.

Llevar al horno precalentado a 180° por alrededor de 25 - 30 minutos. Retirar la torta del horno, dejar entibiar y servir.